La Secretaría de Estado de Minería de Santa Cruz llevó adelante inspecciones en distintos proyectos de exploración de oro y plata ubicados al noroeste del Macizo del Deseado. Las visitas fueron encabezadas por el subsecretario de Geología y Minería, Facundo Hernández, junto a los inspectores de Policía Minera, Santiago Tarcaya y Adrián Toloza.
Las recorridas se desarrollaron durante dos jornadas de trabajo, el miércoles y el jueves, e incluyeron los proyectos Sol de Mayo, Cerro Bayo y La Flora, entre otros. Durante los operativos, se constataron las tareas de exploración que llevan adelante las compañías titulares de las concesiones y se verificó el cumplimiento de la legislación minera vigente.
Según detalló la Secretaría de Estado de Minería, estas acciones se enmarcan en la política de control y acompañamiento que la provincia impulsa para garantizar que las actividades se desarrollen dentro de los marcos normativos establecidos, asegurando tanto la transparencia de los procesos como la sustentabilidad de los trabajos.
Desde el organismo provincial destacaron que las inspecciones permiten no solo controlar la aplicación de la normativa, sino también relevar el estado de avance de los proyectos y detectar posibles necesidades en materia de infraestructura o procedimientos. “Este tipo de tareas son fundamentales para que la provincia mantenga un seguimiento cercano de la exploración minera y pueda garantizar que las empresas actúan con responsabilidad y conforme a la legislación”, señalaron.
Desde la autoridad de aplicación explicaron también que el trabajo de campo incluyó verificaciones técnicas, registros documentales y diálogo con los equipos de las compañías que desarrollan las perforaciones. El objetivo central, remarcaron, es constatar que cada proyecto cumpla con las obligaciones ambientales y administrativas que exige la autoridad de aplicación.
El Macizo del Deseado, ubicado en el centro-noroeste de Santa Cruz, es una de las regiones con mayor potencial aurífero y argentífero del país. En los últimos años ha concentrado inversiones significativas tanto en exploración como en operación, con proyectos que avanzan en distintas etapas de desarrollo. Las inspecciones a concesiones como Sol de Mayo, Cerro Bayo y La Flora responden a la importancia estratégica que estos emprendimientos tienen en la diversificación de la matriz productiva provincial.
Desde la Secretaría de Estado de Minería remarcaron que el seguimiento periódico de los proyectos permite también recopilar información valiosa sobre el ritmo de avance de las campañas de exploración. Esta información es clave para la planificación a mediano y largo plazo del sector, dado que la fase exploratoria es el punto de partida para la posible apertura de nuevas minas en la provincia.
La cartera minera subrayó que la provincia sostiene un esquema de control que busca combinar dos aspectos: por un lado, el acompañamiento técnico a las empresas para que puedan avanzar en sus actividades en condiciones de previsibilidad; y por otro, la fiscalización estricta de los procesos para asegurar que se respeten los marcos legales y ambientales.
Estas inspecciones se suman a otras realizadas en distintas áreas de Santa Cruz en el transcurso del año. El objetivo, indicaron, es sostener un monitoreo constante que permita mantener estándares de transparencia en toda la cadena de la actividad minera.
La Secretaría de Estado de Minería reiteró finalmente que continuará desarrollando este tipo de acciones de manera regular, como parte de una estrategia que busca no solo garantizar el cumplimiento normativo, sino también brindar certidumbre a las comunidades y a los actores de la industria respecto al desarrollo ordenado de la exploración minera en la provincia.
