La canadiense Cerrado Gold (TSXV: CERT, OTC: CRDOF) anunció el inicio formal de sus operaciones subterráneas en Minera Don Nicolás, ubicada en el macizo del Deseado, provincia de Santa Cruz, Argentina. Con esta nueva etapa, la compañía refuerza su presencia en el país y proyecta una mayor expansión productiva, mientras avanza con proyectos estratégicos en Portugal y Canadá.
Desde su base operativa en Toronto, Cerrado Gold mantiene una estrategia de crecimiento equilibrada entre generación de flujo de caja y desarrollo de nuevos activos. Actualmente, la mina Don Nicolás produce unas 55.000 onzas anuales de oro, con un flujo de caja cercano a los 25 millones de dólares estadounidenses al año, considerando un precio de referencia del oro en torno a los 2.100 USD la onza.
Uno de los aspectos destacados por analistas del sitio financiero especializado Mine$tock es el bajo nivel de dilución accionaria que presenta Cerrado. Gracias a los ingresos provenientes de Don Nicolás, la compañía puede financiar proyectos de desarrollo sin recurrir excesivamente a emisiones de acciones, un modelo poco habitual entre mineras junior.
“Con la expansión subterránea en marcha y un paquete de tierras aún poco explorado, Cerrado podría seguir el camino de minas como Cerro Negro o Cerro Vanguardia”, señalaron analistas de Mine$tock, aludiendo a los desarrollos con alto crecimiento de recursos tras los descubrimientos iniciales en la región patagónica.
Además de sus operaciones en Santa Cruz, Cerrado Gold impulsa dos proyectos clave: Lagoa Salgada en Portugal, orientado a minerales críticos como zinc, cobre y estaño, y Mont Sorcier en Quebec, Canadá, enfocado en hierro de alta pureza para acero verde. El primero ya cuenta con un estudio de factibilidad que arroja un Valor Presente Neto (VPN) de 147 millones de dólares y una Tasa Interna de Retorno (TIR) del 39%, con financiamiento avanzado por parte de UK Export Finance y el banco Santander. Se prevé que la producción inicie en 2027.
Por su parte, Mont Sorcier representa una opción de largo plazo que podría revalorizar significativamente a la compañía, con una proyección de VPN post-impuestos de 1.600 millones de dólares. El proyecto apunta a la producción de Direct Reduction Iron (DRI), clave para la transición hacia una industria siderúrgica descarbonizada.
La empresa está liderada por Mark Brennan, quien cuenta con una trayectoria probada en desarrollo de minas y generación de valor accionario, incluyendo experiencias anteriores en Largo Resources y Desert Sun.