Newmont Corporation ha anunciado que, al cierre de 2024, sus reservas minerales alcanzan los 134,1 millones de onzas de oro atribuibles y 13,5 millones de toneladas de cobre, consolidando su posición como una de las principales compañías mineras a nivel mundial. Estos resultados reflejan la estrategia de la empresa de optimizar sus activos y mantener un crecimiento sostenido en sus operaciones globales. En este contexto, las operaciones en Argentina, particularmente en la provincia de Santa Cruz, continúan siendo un pilar fundamental dentro de su cartera de inversiones.
La provincia de Santa Cruz se ha convertido en un actor clave dentro del sector minero argentino, concentrando algunos de los proyectos más significativos del país. La explotación de minerales, especialmente oro y plata, ha dinamizado la economía local, generando empleo, desarrollo de infraestructura y oportunidades para proveedores locales. Empresas de nivel internacional, como Newmont, han identificado el potencial de la región y han invertido en su desarrollo a lo largo de los años.
Dentro de este esquema, la estrategia de Newmont para la optimización de sus reservas y la prolongación de la vida útil de sus minas es crucial. La empresa ha apostado por la exploración y la mejora de sus procesos operativos, buscando maximizar la eficiencia y reducir los costos. En diversas partes del mundo, la minera ha implementado nuevas tecnologías que permiten una mayor recuperación de minerales y una menor huella ambiental, lo que se alinea con los estándares de sostenibilidad cada vez más exigentes.
En Argentina, la minería enfrenta una serie de desafíos relacionados con la estabilidad normativa, la disponibilidad de insumos y el acceso a divisas para el normal desarrollo de las actividades. A pesar de estas dificultades, Newmont ha mantenido su compromiso con el país, enfocándose en la viabilidad de sus operaciones y en la búsqueda de soluciones que permitan mantener el ritmo productivo sin afectar los estándares de seguridad y sostenibilidad.
La realidad de Cerro Negro en Santa Cruz
Cerro Negro, una de las minas de oro operadas por Newmont en Argentina, ubicada en la provincia de Santa Cruz, ha mantenido reservas estables de 3,2 millones de onzas de oro. Sin embargo, la operación no ha estado exenta de dificultades. En los últimos meses, la compañía ha enfrentado una serie de conflictos laborales y sociales que han impactado la producción y la relación con la comunidad local.
La coyuntura en Santa Cruz es compleja. Factores como las condiciones de seguridad en la operación, cabe recordar que la compañía debe responder aun por la vida de dos colaboradores, Rosana Ledesma y Daniel Ochoa, trabajadores que perdieron la vida en uno de los sectores de Cerro Negro, donde posteriormente hubo también otros incidentes. La empresa también enfrentó durante el último tiempo discusiones salariales con varios gremios (AOMA, UOCRA y ASIJEMIN), la demanda de mayor participación local en la cadena de valor y las condiciones laborales en el sector han generado tensiones entre las compañías mineras y los actores locales. Newmont no ha sido ajena a esta realidad y ha debido gestionar estos desafíos en un contexto de alta volatilidad económica y social.
A pesar de estas dificultades, la compañía ha reafirmado su compromiso con la provincia y con el país, buscando soluciones que permitan garantizar la continuidad de las operaciones en Cerro Negro. El diálogo con los sindicatos, las autoridades y la comunidad se ha vuelto clave para encontrar puntos de consenso y avanzar en una agenda que contemple tanto las necesidades de la empresa como las de la región.
El futuro de Cerro Negro dependerá en gran medida de la capacidad de la compañía para adaptarse a estos desafíos y de la evolución del contexto económico y regulatorio en Argentina. Mientras tanto, Newmont continúa con su estrategia de optimización de recursos y exploración, con el objetivo de mantener su competitividad en el sector y contribuir al desarrollo minero de Santa Cruz.