La provincia de Santa Cruz, uno de los pilares de la minería argentina, está avanzando en la adopción de tendencias globales para construir un modelo de minería sostenible. Aunque las acciones implementadas son significativas, el camino hacia la sostenibilidad es un proceso en constante evolución, que se enfrenta a retos y oportunidades que marcarán el futuro de la industria, de cara a los próximos años.
Existen diversos factores sobre los cuales algunas empresas se encuentran ya trabajando para recorrer el complejo camino hacia la sustentabilidad mientras que otras lo plantean aun como objetivo. Desde la redacción de Extremo Minero desarrollamos un pequeño trayecto teórico que aquellas compañías que persiguen la sustentabilidad de sus operaciones como meta deberán, no en este específico orden, recorrer para lograrlo.
Reducción y reutilización como objetivos prioritarios
La economía circular se perfila como una estrategia clave para minimizar los impactos ambientales de las operaciones mineras en Santa Cruz. Empresas del sector trabajan en mejorar la gestión de residuos, aumentar la durabilidad de los equipos y promover prácticas de reutilización de materiales. A nivel provincial, se busca fortalecer las normativas que impulsen modelos de negocio circulares, como parte de un esfuerzo más amplio para reducir el desperdicio y maximizar el uso eficiente de los recursos.
Transparencia en la cadena de suministro
El desarrollo de tecnologías como el blockchain está comenzando a ser considerado en Santa Cruz para garantizar la trazabilidad de los minerales desde su extracción hasta su comercialización. La Secretaría de Minería ha mencionado en diversos informes su interés en adoptar prácticas que permitan una mayor transparencia en los procesos, asegurando que las operaciones sean responsables desde el punto de vista social y ambiental. Estas tecnologías también abren la puerta a incrementar la confianza de los mercados internacionales en la minería santacruceña.
Hacia una integración plena en las decisiones estratégicas
Los aspectos Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG) han comenzado a ocupar un lugar destacado en los planes de inversión de la minería provincial. Aunque aún no se ha alcanzado una integración total, las empresas trabajan en incluir estos criterios como parte de su planificación estratégica, alineándose con las demandas de los mercados globales. Las autoridades provinciales, por su parte, buscan promover una legislación que incentive esta transformación.
Cambio gradual en el modelo energético
La transición hacia fuentes de energía renovables está en marcha en algunos proyectos mineros de Santa Cruz, con avances en la instalación de paneles solares y el uso de tecnologías más eficientes en el consumo energético. Sin embargo, este cambio enfrenta desafíos relacionados con los altos costos iniciales de implementación y la necesidad de infraestructura adecuada. Los planes para fomentar el uso de energías limpias siguen siendo una prioridad para reducir la dependencia de los combustibles fósiles en la actividad minera.
Oportunidades para una gestión más eficiente
El uso de inteligencia artificial e Internet de las Cosas (IoT) representa una oportunidad significativa para optimizar la gestión ambiental en las operaciones mineras de la provincia. Estas herramientas permiten monitorear en tiempo real el impacto de las actividades, reducir emisiones y mejorar la eficiencia en el uso de recursos. En la provincia, la adopción de estas tecnologías aún se encuentra en etapas iniciales, pero su potencial para transformar la industria es reconocido por actores clave.
Un proceso en desarrollo
El recorrido de Santa Cruz hacia una minería sostenible refleja un compromiso gradual que responde tanto a demandas globales como a necesidades locales. La provincia enfrenta retos importantes, como la necesidad de financiamiento para implementar nuevas tecnologías, la actualización de marcos regulatorios y la generación de consensos entre las comunidades, las empresas y las autoridades. Aunque los avances son palpables, el proceso hacia una minería plenamente sostenible requiere tiempo y coordinación entre todos los actores involucrados. El camino no está exento de obstáculos, pero representa una oportunidad para posicionar a Santa Cruz como un referente en prácticas responsables en la industria minera, tanto en Argentina como a nivel internacional.